agosto 2008

Vacaciones

Pues ya están aquí las vacaciones. Supongo que si estás leyendo esto es que o no estás de vacaciones o las estás pasando en casa. Pues nada, a disfrutar que son dos días porque yo no sé si publicaré más por aquí hasta que no pasen unos cuantos días para desgracia de muy pocos y para alegría de los restantes.

Ya sabes, aprovecha el tiempo que te queda, que no es poco, y estate cerca de los tuyos y los que te quieren. Yo volveré un día de estos o igual vuelvo esporádicamente. ¿Quién sabe? Pero volver, volveré.

4 años de EBDT

Por cierto, ¿sabes que hoy sábado 9 de agosto esta bitácora cumple nada más y nada menos que 4 añitos? Pues sí, sí. Parece que fue el mes pasado que empecé con esto. Para que veas. Y la guerra que me gustaría dar. Bueno, todo se andará. Eso sí, gracias a ti por seguir comentando mis burradas o simplemente leyéndome de vez en cuando.

Bueno, menos tonterías y al turrón, que aunque el vídeo de marcheta se haya retrasado un día eso no significa que no tenga una buena razón. Enga, ¡a mover el esqueleto!

Vacaciones Leer más »

Hambre

Tengo hambre. No, no te preocupes (si es que lo ibas a hacer), no estoy en un país de esos que desgraciadamente lo pasan fatal con el tema alimentario, ni tampoco me he quedado sin dinero para poder nutrirme adecuadamente. Es más, te puedo asegurar que mis lorzas impedirían que me muriese de hambre durante más de un mes (eso tirando a poco). Lo que pasa es que mi estómago es muy vago y prefiere pedir de comer a aprovechar la grasa que tengo pegada a mi pared abdominal, que dicho ya de paso, ayudaría a que mi figura fuera más esbelta y atractiva, con lo cual y como todo el mundo sabe, igual tendría que quitarme las mujeres de encima pidiéndome favores sexuales en un número equivalente a moscas enfrente de un plato de pescado en pleno verano y al aire libre.

Ilusiones calenturientas aparte y como te decía, tengo hambre porque en esta oficina no sé si se puede comer o no. Sí, ya sé que llevo como tres días trabajando aquí y debería tener la cara suficiente como para preguntar si me puedo comer un bocadillo en la mesa que me han prestado. Pero como uno es más corto que la manga de un chaleco, no lo he hecho y he preferido mirar a ver qué hacen los demás. Y por lo que he podido observar (que otra cosa no, pero de eso sé un rato) nadie come aquí. Esto no es determinante para averiguar si está permitido o no, pero es que o bien esta gente (que son 4 gatos) no pasa hambre y se hinchan a huevos fritos con chorizo y panceta en el desayuno de cada mañana (sin faltar, por supuesto, el café con sacarina) o es que todos nos estamos preguntando lo mismo. Esto último lo dudo porque hay gente que lleva más tiempo que yo, así que no me vale.

A nivel comparativo (en volumen me refiero) me parece que yo gano por peso. Así que o solo comen los chorizos y huevos mencionados para todo el día o me estoy equivocando. Por lo que creo que al final voy a echarle morro al asunto y sacaré mi bocata. Si me dicen algo, pues lo volveré a guardar (después de subirme la temperatura corporal y cambiarme el color de la cara, claro) y aquí no ha pasado nada. Que no me voy a dar el gusto de adelgazar a estas alturas (la operación bikini ya ha terminado, recuerda). Además mi madre me dice que estoy muy guapo aunque mi mujer, por una extraña razón, no me expresa su opinión y me mira como raro.

Hambre Leer más »

El aburrimiento

Pues aquí estoy, en un trabajo nuevo donde apenas nadie me conoce y donde apenas hay trabajo. Me parece que van a ser un par de semanas un poco largas. Por suerte ya solo me falta media hora para que termine mi lunes y poder pasar página de este día tan aburrido. Bueno, mejor no diría aburrido, aunque sí en términos de trabajo estrictamente. Será cuestión de tomárselo con filosofía y aprovechar el tiempo de ocio.

Aún recuerdo aquellos tiempos en Delphi en los que llegaba a las 6 de la mañana y acababa a las dos de la tarde en agosto. Que tiempos. Como cuando tenía que parar todos los servidores porque hacían mantenimientos eléctricos y solo dejaba el servidor proxy (realmente era un PC) para poderme conectar a Internet ya que me encontraba totalmente solo y desamparado. Aunque llegó un momento en el cual me sentí tan aburrido, pero tanto, tanto, que se me giró el cerebro y me puse a comprar todo tipo de chucherías en las máquinas expendedoras. Por suerte para mí no me lo comí todo porque las pastas seguían siendo igual de malas. Hay que ver la de tonterías que llegamos a hacer cuando no estamos bien.

Ahora saldré de las oficinas, me comeré mi bocata y me iré a casa en el tren. Cuando llegue a casa me pondré a ver el programa chorra de turno y luego editaré esta entrada para que el martes esté publicada tempranito.

Ya ves las apasionantes aventuras de agosto.

El aburrimiento Leer más »

San-fran-sisco

Este fin de semana es algo más que un fin de semana. Para algunos ya empiezan las vacaciones y eso es como un fin de semana pero a lo bestia. Algunos se lo han ganado más que otros, pero es como un dulce que no amarga a nadie.

Así que disfruta de los días que te permiten tener antes de volver al tajo y te empieces a cabrear porque tu compañero ha estado en un sitio mejor y más caro que tú. O que te pasen el cinexín de fotos y vídeos (aburridos, todo hay que decirlo) de ese destino exótico que solo él se ha podido costear.



San-fran-sisco Leer más »