Un día más. ¿Por qué no haces aquello que tantas veces te repites? Aquella carta que tienes pendiente de escribir. Aquella llamada. Sí, es aquello que te dices: pues ¿por qué no lo hace él o ella? Da lo mismo. Hazlo tú. Alguien ha de ser el primero. ¿Qué más da? Inténtalo. Ya verás que bien. No pienses que te vas a sentir rechazado. Siempre alegra una buena llamada y nunca molesta.
1. Bueno, como pero me iría muy justo por lo que opto por ir a la hora del café.
2. Ya está.
3. Pues no mucho. Recuerda que yo vengo también de Blogger e hice una migración.
4. Me has caído simpática. Te voy a comprar todos los boletos.
Besotes.
1. Y acabo de hablar con Eva y me dice que tú no vienes… que la Raquel trabaja. ¿Pero no comes cuando la Raquel trabaja? ¿Prefieres comer en tu casa solo que acompañado de tus colegas?
2. 😛
3. Te llamo y quedamos pronto. ¿Será muy complicado hacerlo teniendo la página con blogger?
4. A ti, guapo. 😉
1. Sí.
2. Lo sé. Veo que eres muy observadora. Me gusta (ahora lo corrijo).
3. Cuando quieras y donde quieras.
4. Gracias.
Gracias por pasar por aquí.
Por cierto, han sido 4 cositas, no 3, pero bueno, no importa. 😉
3 cositas:
1. ¿te ha dicho el Cristo que quedamos para el día 16 en su casa?
2. En "sobre Lynze" el adjetivo "superficial" está repetido.
3. Me tienes que enseñar a usar el WordPress.
4. Me gusta el nuevo diseño de tu blog.
🙂